Les presento a Luís Domingo, el hombre que me desvela

No siempre nos da tiempo de asistir a las actividades culturales. Pero siempre podemos estar en las mismas y de la manera en que nunca llegaríamos a una actividad en pijama o desnudos… las mujeres sin maquillaje, casi todos en la cama donde siempre duermen… pero eso si, desvelándose sin saber si aun es la noche del día o la madrugada del día siguiente… todo ¿por culpa de quien? Del caballero numero uno de la cultura en Guatemala, don Luís Domingo Valladares Molina, el señor rebelde que nos desvela… ¡Oh si! Si alguien nos quita el sueño es el. Así que hoy se lo vamos a quitar a el porque nos encargaremos que este reportaje lo lea hasta bien noche….

Les presento a Luís Domingo, el hombre que me desvela
Por Cesar Chupina, periodista

El llanto del a sociedad… tan amargo…
Sentir ese vacío intenso de tumba…
Nadie responde… nadie acude…
Siempre esa sociedad…
Ese intenso silencio…
Ese querer ser… y no querer ser…
Nadie escucha…
Gimo… lloro…
Silencio… siempre el silencio.
Vibran mis sentidos… no tienen res respuesta…
Quiero callar… y vivo en un grito…
Un grito de angustia…
Un grito de soledad… Soledad…

La tía abuela y el piano…
“Nací el 31 de julio de 1929, nos cuenta Luís Domingo, en la ciudad capital de Guatemala. Exactamente en la 5ª ave. Norte No. 7 hoy zona 1. Es decir, 5ª ave. Y 6ª. Calle zona 1. Soy el mayor de varios hermanos,. Me siguen Rosario,, Lucia, Rodrigo y Acisclo. Cuando tenia 9 años me vine a mi casa de lo que ahora es la 9ª. Acalle y 11 ave. Zona 1. El recuerdo de mi infancia que más guardo es l a llegada a Guatemala de una de mis tías abuelas, cuando yo tenía 5 años. Ella radicaba desde hace 20 años en Europa pero con motivo de la guerra regresó. Vela bajar del tren en la estación me causo un gran impacto porque usaba bastón ya que la habían operado muchas veces de una pierna. No se si fue eso pero desde entonces tuve una sensación de cariño mezclada con devoción. Fui muy querido por ella y ella muy querida por mi. Le gustaba mucho el piano, me hablaba mucho de teatro, siendo una de mis motivaciones para mi carrera posterior ya que fui pianista antes. Estudie en el Conservatorio. Me auguraban bastante éxito cuando tenía yo 17 años. Pero en 1950, a loas 18 años, cuando fui a los estados Unidos, vi “La Muerte un Viajante” en Boston con Walter Mitchel me dije que lo que yo quería ser es actor y deje el piano. Es cierto que antes bahía hecho yo obras en el colegio pero ese viaje fue determinante… Mis maestros de música me quitaron el habla porque era una barbaridad lo que había hecho: Dejar mi futuro brillante como solista a poco tiempo de terminar mis estudios. Pero no me arrepentí. Lo que pasa es que yo tomo todas las cosas de mi vida muy en serio. El piano para mi no era un hobbie sino una profesión como después lo fue el teatro. Mi madre, en cambio, lo tomaba como un hobbie… pero mi padre se alarmo bastante cuando, después de graduarme de Bachiller en el Liceo Guatemala, abandone la carrera de Derecho, tras cursarla dos años… Cuando le dije que quería ser actor le dio temor no por los prejuicios porque el siempre fue muy amplio sino por la parte económica. Es que era de una familia de abogados, hijo de abogados, un nombre, etc. Sobretodo en aquellos tiempos donde en teatro solo se pensaba en don Alberto Martínez y doña Sara Esteban. Hoy en día eso es diferente. Pero nunca me lo impidieron. Tan es así que tuve todo el apoyo de mis padres cuando me fui a México en 1954. Lo que deseaban es que no me quedara a medías, sino que lo hiciera en serio y triunfara. Mi tía abuela, por su parte, se molesto por lo del piano, pero le gustaba el teatro. Por lo que lamento mi decisión es que cuando me fui a México mi ausencia le afecto muchísimo”.

Siempre te he sido infiel.
Tu imagen se pierde entre las sombras.
La negra noche.
El frío del alma.
La media luz de tu recuerdo…
Y sin embargo, siento que te amo.
Vago sentir…
Borrasca de sentimientos…
Borrachera del alma…

La abuela Maria
Siempre hay una abuelita maravillosa en nuestra infancia. La de luis domingo era doña Maria. “Preparó mi primera comunión antes de someterse a la operación. Presentía lo que iba a ocurrir. Por eso se opero de la catarata del otro después de esa fiesta. Quedo ciega y los ultimaos años de su vida no vio nada. Me decía siempre, pese a no ver nada: Quiero que me lleves a ver las procesiones, a ver a la Virgen del Rosario, etc. Nunca tuvo una queja ni una lagrima. Siempre fue un ejemplo de vida para nosotros. Cuando ella fallece, su ausencia implico una falta increíble. Le gustaba hacer su cama, que le leyera los periódicos. Murió el 20 de agosto de 1957. Al día siguiente debutaba como primer actor con Margarita Xirgú, la famosa actriz de las obras de Loca; Maricruz Olivier y Raúl Faretti. Fue un golpe muy fuerte para mi no estar con mi madre en esos momentos del a enfermedad fulminante y sepelio. Pero la función debe continuar…”.
¿Era una mejor Guatemala? “Habría que estar más al tanto de cómo lo ve la juventud de ahora. Uno lo mira bajo su propia perspectiva y desde ella noto que había mas unión familiar, las distancias eran mas cortas, los horarios de comida se cumplían, etc. Soy fanático de las tradiciones y esos recuerdos familiares están siempre ligado a las mismas: Posadas, novenas del Niño, fiambre, etc. Que ya no interesan mucho a los jóvenes de hoy. En el fondo, lamento no siga este tipo de vida. Actualmente, el espíritu navideño me deprime un poco…”.

El humo intenso…
Las miradas que desnudan…
Sexo en espera…
Instantes de vida.
Amaneceres de hastío.

-¡Se dice basta… y se vuelve a llegar…!

…Y siempre el mismo mundo….
… Y siempre el mismo amar…

Lorca y la poesía…
“De mis primeras experiencias que tuve en teatro fue con doña Sara Esteban viuda de Bergara dirigía teatro en Guatemala para obras de beneficio. Había sido dama joven de la compañía de Ricardo Calvo, de las compañías que .venían a hacer la América. Su influencia como española y la de mi tía abuela que vivió en España me hicieron una afición por lo español… Luego, en el 51 y el 52, daba clases de Literatura hispanoamericana y guatemalteca en el Liceo Guatemala. Ya estaba yo identificado un poco con Lorca debido a mi afición a la lectura. Pero sobretodo en 1953, cuando funcionaba el teatro de Arte de Guatemala con Carlos Girón Cerna, Manuel Galich y Carlos Marsicovetere vino a Guatemala el cuñado del ultimo presiden de la republica española que había sido director de muchas compañías españolas entre ellas las de margarita Xirgú. El nos involucro en el teatro más. Nos llamo la atención que había estrenado casi todas las obras de Lorca. En 1957, Margarita viene a Guatemala y hace obras de Lorca. Entonces fue mi identificación aun mayor con Lorca. Cuando hice con ella “El Zoológico de Cristal” de Tenesse Williams en México tengo muy presente mi ultima platica con ella. Me dijo: Luis domingo le auguro grandes éxitos en su carrera artística, y desde ya le digo que cuando se estudia el teatro se estudia el teatro español. Usted siempre tendría trabajo en España. Basta haber sido primer actor conmigo”.
La Xirgú fue una especie de hada madrina para Luis domingo quien en sus primeras actuaciones y buscando su nombre aparece en los programas como Ricardo Val (Val de Valladares). Se pone Luis domingo mas tarde aunque su madre le dice que parece “nombre de torero”, siendo uno de los primeras que uso solo nombre sin apellido en el mundo cultural guatemalteco. Luego, en México trabajo con Maria teresa Montoya. Una revista lo propone dentro de una terna como la Revelación Artística de México. Luis Domingo venía siempre a Guatemala y en uno de esos viajes, Guatemala rompió relaciones con México por un problema marítimo y como allá siempre el fue presentado como actor guatemalteco, lo prudente era ya no regresar, así que no pudo concretar sus contratos de cine. Cuando iba a volver en 1960, el presidente Idígoras lo nombro director de Bellas Artes y esto lo hizo quedarse definitivamente en el país…
Por otra parte, Luis domingo, desde el colegio escribía. Cuando estaba en México publico dos poemarios: “Momentos” y “Soledades” (1955 y 56). “Alfonso reyes las calificó de preciosas las “Soledades”, vanidad aparte. Asistía casi a diario a las tertulios de León Felipe y también me dijo tenia buen principio. En Guatemala me impulso Malin de Chevers… pero, luego, lo dejé, ahora ya casi no escribo. Lo que he hecho con las lecturas poéticas que es otra forma no solo de dar a conocer la poesía sino de amarla: Así estuve en Europa, América del Sur, México, etc. Presentándome con ellas…”.

Tiempo que naces… ¿En dónde?
Tiempo que mueres… ¿Cuándo…?
Tiempo que serás y que Eres…
Tiempo… Tiempo… Vida.

El rebelde del momento y ¡los festivales!
"Yo simbolizaba un poco la rebeldía de esos momentos en Guatemala. Había hecho cosas que solo un rebelde podría hacer: Montar obras atrevidas, decidirme a hacer de mi vida lo que quería, etc. Fue sorpresivo para mi y otras personas el nombramiento que Idígoras me hizo. Nunca me unió a el los compromisos políticos. Fue un reto porque los independientes del teatro criticábamos. Así que había que demostrar que podíamos del 60 al 64. Esto es algo que me satisface muchísimo porque pude darle el espaldarazo a muchas personas que luego han sido maestros de maestros. Me dejaron hacer aunque había cortapisas económicas. Pero como había mucho amor al arte y lo que sobraban eran ganas de hacer las cosas se logro un apoyo por parte de mis conocidos y moralmente. Además, estaba siempre abierto a todas las tendencias. Tan es así que en ese momento eran estudiantes de Artes Plásticas Elmar René Rojas, Marco Augusto Quiroa Pereira, Roberto Cabrera, Abularach que estaba afuera y Manolo Gallardo a quien becamos de manera especial. No había partida de becas y entonces yo compraba a su madre cuadros de el y así se sostenía… Fuimos, además, pioneros de las galerías… Hicimos muchas exposiciones para la época. A Ramón Banús, por ejemplo, le ayude en su primera individual… Con la Sinfónica, trajimos como director a Ricardo del Carmen. Del Ballet, a Antonio Crespo. De la escuela de Danza, a Crista Mertins. Eran todos muy jóvenes. Funde en Bellas Artes el departamento de Letras y allí y en espectáculos Públicos me ayudo Manuel José, Rubén Morales Monroy, ¡no se diga! En el 60, logro que se fuera a México junto a Jorge Hernández y Neto Mérida. A Rubén se le prolongo. Me junto con el en septiembre de ese año y comentamos que ojala se pueden hacer festivales en Guatemala como en México donde solo se ponían autores mexicanos… Al regresar, le doy la dirección del teatro popular de B ellas Artes, la compañía de obras que hicimos en el Conservatorio… en 1961 inician los festivales de teatro…”. En teatro Luis Domingo también ha impulsado siempre a otros valores. Fu así como consiguió, con un primo suyo, dueño del edificio El Centro, un local para cobijar Teatrocentro, la raíz de la vanguardia del teatro en Guatemala. Cuando Luís Domingo estuvo de director de un banco, hizo que un salón se convirtiera en galería. “la satisfacción esta en que no nos equivocamos”, nos dice. “Tal vez no teníamos dinero pero si apoyábamos moralmente. El teatro para niños fue uno de mis objetivos. Así, por ejemplo, ayudamos a Rene Molina en el teatro Capitol. No lo hicimos económicamente pero le di sonido, tramoya, etc. Y allí nació el teatro para niños. La satisfacción es que en ese justo momento se fundo la compañía y yo pude ayuda. El éxito fue hermoso. Después se multiplico en ocho o más compañías”. Decían los chismosos que Rubén Morales era su favorito y que Luís Domingo lo consentía mucho: “Lo que pasa es que al igual que todo artista tenia su carácter temperamental. Como Jorge Sarmientos, por ejemplo. Una vez vino el y me dijo: después que yo ya me había ido de Bellas Artes, que el si podía seguir allí pero que había un ambiente raro… claro allí no le iban a aguantar ningún vedetismo como yo… también me dijo que tenia una propuesta: Encargarse de la Academia de la UP… Rubén no titubees, le dije, acéptalo. Es una academia y recuérdate que hay una sala de teatro que le puedes dar vida. No me equivoque. Seguimos allí todos los festivales de los cuales yo fui el presidente en dos oportunidades… Al dejarse de hacer los festivales nos produjo mucho dolor pero, como lo importante era la producción nacional se siguió haciendo… “. Ahora bien ¿qué tan temperamental es Luís Domingo? ¿Cómo Rubén… o Sarmientos? “Todos tenemos nuestros momentitos y sobretodo cuando se está con mucha tensión. Tengo un carácter fuerte. Sin embargo, por ello, he tratado de dominarme. No he caído en ese tipo de vedetismo… Nunca fue así. Cuando estallo es cuando la gota de agua realmente se derrama no tanto por cosas que me han hecho a mi sino por cosas que le hacen a mis amigos artistas…”.

Hay niños que no son niños…
Hay seres que no son seres…
Hay hambre… Hay sangre… Hay muerte…
¡Ay alma!

Buenos días… buenas noches…
La ultima obra de teatro de Luís Domingo fue “Las monjas”. Dato curioso es que nuestro personaje hizo solo cine en Guatemala en las coproducciones de aquella época. Entre ellas: “Derecho de Asilo” con Cameron Michel, Ricardo Blume, Flor Procura, etc. también, “Sangre Derramada” con Irma Lozano y Víctor Junco. En cine también estuvo a cargo de la Dirección de espectáculos y allí siempre nuestro entrevistado defendía la libertad de expresión y empresarial. Lo que si hizo siempre Luís Domingo fue radio. En México trabajo con figuras como Carmen Montejo y en Guatemala se dio gusto en radios como Nuevo mundo, TGW, etc. con todos los grandes actores de la época. También hizo televisión en Canal 8 y turismo, otra de sus pasiones, viajando mucho en el interior de Guatemala y el extranjero. Cuando fue presidente del Patronato de Bellas Artes impulsó el teatro musical de Carlos Marroquín y Zoed Toledo, QEPD los dos. En 1983 se dedica ya exclusivamente a su programa periodístico “Cuestión de Minutos”, programa de TV en el que este señor rebelde nos desvela y nos hace perder la noción del tiempo cuando nos dice “buenas noches… buenos días” atendiendo a si es aún antes de la medianoche o la madrugada del día siguiente.
Cuando conocí a Luís Domingo me sentí atraído por su forma de decir la poesía. Conformé un grupo literario llamado “Cristal” y le dije: voy a ver si lee uno de mis poemas en su programa… “Cuestión de minutos” en ese entonces estaba en la 12 calle A zona 1, entre 3ª y 4ª avenidas. Fui a conocerlo, a saludarlo, le conté de qué se trataba… pero me dio miedo… la idea de estar ante cámaras me paró los pelos que me sobran en todo el cuerpo y cuando me dijo: Vuelvo, voy a ver si ya está todo listo… entró a lo que sin duda era el estudio… de puntillas empecé a irme… bajé las gradas y salí corriendo… abriendo estaba yo la puerta cuando aún alcancé a oír que su original tono de voz preguntaba a la secretaria: ¿Ya se fue? Si, respondió ella, como alma que se lo lleva el diablo… Salí de aquel lugar y sólo sentí como si un calor intenso se fuera de mi cuerpo… era el alivio… respiré profundo… pero esa noche al ver “Cuestión de Minutos”, Luís Domingo leyó uno de mis poemas y dijo que le habían gustado. Ni de chiste mencionó el incidente. Creí esto no iba a ocurrir. Actualmente, ya siendo su amigo, me sorprende de vez en cuando, leyendo uno de mis escritos, poemas, artículos, comentarios, críticas y por muy de mal humor que yo esté siempre me hace sonreír…
LUIS DOMINGO: “Empecé con mis lecturas de poesía. Pero no le daba chance a nadie, el director de entonces me deja el programa porque se va a USA. Me quedo como director y gracias al apoyo de Canal 2 y ahora Canal 12 el programa sube a una hora y puedo llevar los acontecimientos culturales completos… Los que no pueden asistir siempre están en primera fila”. ¿Qué opina de ser considerado el hombre que nos desvela? “Como siempre he sido trasnochador yu mi familia está acostumbrada porque siempre me he acostado a las 4 de la mañana más o menos, duermo mis ocho horas sin cumplirse aquello de que la gente que se levanta tarde no trabaja, ¡hasta más se trabaja! Hay mucha disciplina en eso. Lo que pasa es que no se está en los horarios convencionales de la gente convencional”. Sin duda, con este programa Luís domingo cumple todas sus inquietudes: sigue ayudando, hace de alguna manera teatro, lee poesía, etc. “Eso es cierto – nos dice- como en cualquier medio se puede hacer daño o mucho bien. Lo que uno tiene que aprovechar es los espacios que le da a uno la vida… Así que al querer hacer algo diferente pongo mi granito de arena con mi inquietud de siempre: La vida cultural. Respeto mucho la forma de llevar cada quien su medio y los campos que cubren. Además, pienso que estoy haciendo teatro porque interpreto el personaje de periodista… me lo gozo todo… me da gusto que sea en el medio que yo dirijo que llegue a toda Guatemala”. ¿Está realizado? “esa pregunta nos la hacen cuando estamos en la infancia de la tercera edad. Pero de verdad: No cambiaría nada. He estado muy satisfecho de mi vida. Doy gracias a Dios por mis padres, entorno familiar, amistades extraordinarias durante toda mi vida… Lo importante en la vida es defender uno sus creencias. Trabajar con libertad y estimular. Hasta este momento tratamos de impulsar a quien esté aportando algo. Lo importante es dar aunque uno no siempre comparta la simpatía hacia las cosas… Me decía a mí siempre, no hay cosa más hermosa que la juventud. Por ello, digo a los jóvenes yo: Deben ser sinceros consigo mismo, defender sus ideales y luchar u tratar de salir adelante u no hacer caso sólo a cosas materiales que nuestro paso es muy transitorio en este mundo yu al otro lo mejor que podemos llevarnos es la satisfacción de las cosas positivas”. Sabemos que la satisfacción es el premio más grande para un hombre como Luís domingo. Se suma a todos los cosechados en su vida. Entre ellos, la condecoración española Isabel la Católica; de México, el Águila Azteca; de Italia, orden al Mérito de la República italiana y la Medalla de Oro del ministerio de relaciones Exteriores de Argentina; Orden al Mérito José de san Martín de Nicaragua; Llave de Oro de Managua; de Guatemala: Medalla Hugo carrillo, Galardón Dios de la Victoria en Arte y Promoción; Medalla Francisco méndez; medalla Alejandro Córdova; Libro de oro de la red del centro Histórico; Declaratoria de Caballero de la cultura junto a Tasso Hadjidodou y coronación por lo mismo con laureles del triunfo; Medalla Federico González Campo; Corazón de Oro de la APG; infinidad de diplomas de instituciones varias; etc., etc., etc.
Obviamente hablar de Luís domingo nos ocuparía más espacio. Pero sirva este documento de homenaje y recordatorio que cuando un ángel baja a la tierra a custodiar tesoros no siempre se le ven las alas. A este ángel conocido como Luís domingo y cuyo verdadero nombre es en su cédula de vecindad Luís Domingo Ignacio Acisclo Manuel de Jesús Toribio de Mongrovejo (por Santo Toribio) se le encomendó el cofre del tesoro de la cultura guatemalteca y han sido muchas las joyas que de él ha sacado así como es toda Guatemala la que ha recibido el cobijo de sus alas. ¡Salve oh dios de la Victoria inmortal y eterno!, el hombre que me desvela y a quien he presentado a mis lectores de todas partes del mundo.

Tarde de abril…
…Mi vida entera.
Noches de ayer…
…Muerte de hoy.
Despertar de mis sentidos:
Infierno… dudas… soledad.

NOTA: El texto en negritas corresponde al poemario “Soledades” de Luís Domingo. El mismo fue editado en 1956 y es fiel muestra de su vena poética.